Hola a todas y todos;
Soy Mª Ángeles, mujer, esposa, hija, hermana, amiga…. de 42 años y hace 2 años fui diagnosticada de cáncer de mama. Es pronto quizás para decir que he superado la enfermedad pero mi familia y yo así lo sentimos y mis revisiones médicas lo van confirmando.
Cuando me diagnosticaron la enfermedad yo me encontraba en un estado emocional, no muy bueno (de todas maneras, no se está preparado para una noticia así). Hacía unos meses que acababa de perder a mi madre por la misma enfermedad. Había perdido a mi madre y pensé que a mí me iba a pasar lo mismo en un periodo corto de tiempo, no veía otra cosa delante de mí. Mi vida se derrumbó frente a una frase: “tienes cáncer de mama”.
Los primeros momentos, días, noches, meses fueron duros; no por el tratamiento -yo ya sabía lo que me iba a ocurrir-, ni porque tenía que dejar aparcada momentáneamente mi vida -de ser una profesional pasaba a ser una paciente con todo lo que esto implica-; sino por los pensamientos nefastos que pasaban por mi cabeza a cada momento y que me estaban haciendo sufrir más que la enfermedad en sí.
Un día, al estar poniéndome la “quimio”, (yo siempre con lágrimas en los ojos) la persona sentada a mi lado me dijo que no sufriera que todo estaba en nuestra mente; apenas le entendí ni le escuché. Pero esta simple frase, y que fortuitamente me ofrecieron ayuda psicológica, hizo que mi proceso cambiase.
Empecé a sentirme más tranquila; me enseñaron a controlar esos pensamientos tan dañinos y mi vida cambió radicalmente. Me obligué a salir a caminar a diario (cuando la “quimio” me lo permitía), acudía a clases de yoga y relajación, iba a ver jugar al equipo de fútbol de mi hijo lo cual me divertía muchísimo (no me perdí ese año ningún partido); y empecé a darme cuenta de todo lo bueno que tenía a mi alrededor y que hasta ahora no había percibido. No sé si fue todo esto o que el cuerpo se acostumbra, pero los síntomas de la “quimio” disminuyeron bastante. Quizás era no estaba tan pendiente de ellos
La “quimio”, la intervención, la “radio”, todo quedo atrás y ahora me encuentro aquí, estupendamente viviendo el día a día y con mucha ganas de ayudar a personas que se encuentran en mi misma situación
No es que me alegre de haber tenido la enfermedad pero el haber pasado por esta situación me ha permitido conocer personas fuertes, buenas y luchadoras, situaciones inimaginables….; y todo esto creo que me ha convertido en mejor persona enseñándome a valorar todo lo bueno que tengo y a disfrutar de cada día que amanece porque sé que puedo aportar algo al mundo en el que vivo; en definitiva soy más feliz.
No me puedo olvidar de TODOS los profesionales que me atendieron, ni de las personas luchadoras que he encontrado por el camino que me ofrecían una palabra de ánimo cada día, ni de los que a diario estuvieron conmigo.
Sea este testimonio un recuerdo para ellos, para las que se fueron, un aliento para las que están ahora y un mensaje esperanzador para el futuro de la enfermedad.
“El amor y la gratitud pueden disolver cualquier enfermedad”. El secreto de Rhonda Byrne
Por Mª Ángeles
Gracias Cristina por tu comentario ha sido muy grato
ResponderEliminarSaludos
me parece genial que estemos conectadas
ResponderEliminarana una foto muy bonita de tu hermana nati
ResponderEliminares un comentario muy esplicito ,muchas gracias
ResponderEliminarHoy es un dia especial y he conocido a Mª Angeles. Quiero decirte que admiro tu entrega, ayuda y generosidad
ResponderEliminargracias cristina por animarme
ResponderEliminarmuchas gracias por tus consejos. la verdad nos sirve de mucho..besos.
ResponderEliminarme encuentro bien de estoy haciendo el taller
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